Adiós a la palabra escrita a mano

Rita Lina Piñero Gudiño

Viendo al pequeño hijo de mi amiga, Abraham, de 4 años, teclear su nombre en la computadora de su casa le solicité que me lo escribiera a mano y resultó que lo sabía hacer, pero, copiando las letras del teclado con las maneras obvias de alguien que no sabe escribir. ¿Se nos va olvidar escribir a mano? Es lo que me pregunté. Todo esto hizo volar mi imaginación, pensé en un futuro no muy lejano en el que nadie sabe escribir a mano, todo es teclear. Aún siendo fiel seguidora de la nueva tecnología me puse a recapacitar si sería posible que esto sucediera con el pasar de los años. Cada vez más en la educación se habla de utilizar computadores. Si sabemos que en la educación diaria se utilizan computadores y en el hogar también, podríamos pensar que los exámenes se harán con computador. Entonces, los niños aprenderán a leer y escribir, por supuesto, en un teclado, a Times New Roman y 12 Ptos. Esa será la letra de todos, en fin, existe una variedad ¿todo esto será posible? ¿Podemos arriesgarnos a decir que la escritura como tal va a desaparecer? Supongo que habrá quien lo considere una evolución, como lo fue de la piedra al papel y del papel a la imprenta, como lo ha sido el computador y el mismisimo Internet.

NOSTALGIA DE UN AYER
Las historias verdaderas de amor escritas están muy lejos de ser lo que eran antes,¿cartas de amor?, ¿notas de pasión? Han desaparecido del entorno romántico del planeta, el poeta portugués Fernando Pessoa en una oportunidad escribió: “Todas las cartas de amor son ridículas y no serían cartas de amor sino fueran ridículas”. Pero el mundo ha dejado de ser ridículo y los mensajes de amor sin mucha pasión se envían por mensaje de texto telefónico o por correo electrónico o en los espacios públicos de las redes sociales. Los jóvenes proclaman su amor electrónicamente perdiéndose la privacidad. Las misivas a larga distancia y por correo prácticamente son nulas, ya hacia las décadas de los años 60 y 70 se inició su fin, gracias a la evolución del teléfono. La información proveniente de las oficinas de correos mencionan que las cartas personales hace mucho tiempo tienen un papel secundario en las dimensiones del flujo postal en todo el mundo. El correo hoy en día no es utilizado ni por los más viejos y mucho menos por la población de jóvenes.

PERDIDA EN EL TIEMPO Atrás quedó la caligrafía como enseñanza, como asignatura. La caligrafía desapareció de las escuelas y colegios como materia principal y esencial. La palabra escrita como arte de trazos finos y de rasgo fuerte para publicidad es muy poco lo que se conserva en el mundo. La lengua escrita es una copia de la lengua hablada, si no se tiene problema al hablar tampoco deberá tenerlo al escribir. Es preocupante saber que con el amplísimo mundo de la educación existan áreas descuidadas, una de ellas es la comunicación escrita. Así que es necesario rescatar y cultivar esta formación y no descuidarla en ninguno de los niveles educativos: Desde la infancia continuando en secundaria y luego en la universidad para poder mantenerla y no dejarla morir.

ESPAÑOL CIBERNÉTICO
La mensajería instantánea, las redes sociales y la flojera de los jóvenes han sido los causantes de la desaparición de un correcto español, el lenguaje cibernético está acabando con él. Ya la ignorancia o el poco estudio no son causas para justificar la mala escritura que se ha dejado ver en los últimos tiempos. La falta de interés por corregirla la convierte en costumbre, errores que antes parecían inadmisibles se han convertido en parte de un nuevo vocabulario, unido a esto la mensajería instantánea, como su nombre lo dice, es cada día más rápida, corta y más instantánea. Hoy por hoy la proliferación de los errores ortográficos abundan además en los medios de comunicación; en prensa y televisión se puede divisar desde los anuncios publicitarios, titulares, entre otros. También existe una cantidad de egresados universitarios que poseen cantidades de vicios en la escritura y ni se preocupan por saber cuál es la forma correcta de escribirlo.
Pensamos que la escritura a mano con toda su mística y estilo podría desaparecer, pues el lenguaje cibernético está ayudando muchísimo para lograrlo. Los jóvenes que aún se encuentran en formación son los primeros en caer en estos errores por desconocer y aceptar la nueva escritura. Por lo tanto, es necesario hacer campañas de rescate, la verdadera destrucción del español radica en dejar pasar los errores y la falta de interés por corregir y aprender.